Es algo sabido que no sólo de acumilar miniaturas infames vive el ansioso miniaturista, sino que también dedica su precioso tiempo a rebuscar por ahí en busca de cualquier baratija o trozo de algo que pueda usar para decorar las peanas (casi siempre imaginarias y nunca llevadas a cabo) de los moñacos.
Así pues, con esta entrada se inaugura una nueva categoría: Miserias Molonas. Serán mostrados aquí todos los bártulos y materiales que se acumulan en armarios, cocheras, cajas, bajo la cama... etc, y que tienen un futuro tan incierto como la mayoría de minis que compramos.
El material de hoy es lo que las revistas serias llaman "ovillos de mar". Resulta ser aquello que el mar escupe con desprecio y que los ávidos modelistas recogen con entusiasmo. Sirven ni más ni menos que para simular hierbajos y matojos, con gran realismo. Se pueden comprar (si no hay más remedio...), pero para aquél que viva cerca del mar, hay tantos como puedas recoger, ¡y gratis!. Y lo mejor es que suelen venir acompañados de otras cosas igualmente inteserantes, como trozos de esponja, algas secas de aspecto raro, trozos de madera desgastada... vamos, tesoros que únicamente relucen para los ojos de los iluminados.
Felizmente, puede acercarme a la playa el otro día y entre olas y mareas pude capturar algunos y llenar una buena bolsa de Mercadona con estos tesoros gumiosos jeje
Ovillos de mar, desparasitados. |
Miserias de Mar, que son los ovillos en estado salvaje, junto con otras cosas molonas. |
Unos pocos Ovillos ya caracterizados como hierbajos (nótese la diferencia con las cerdas de pincel viejo). |
Que los dioses os acompañen en vuestras felonías y saqueos!
Por fin voy a tener estas miserias en mi casa! Yujuuuu!
ResponderEliminarEsto es modelismo de subsistencia, dí que sí.
Saludetes...